21 ene 2019

Del enamoramiento a la dependencia y de la dependencia al maltrato.

Del enamoramiento a la dependencia Y de la dependencia al maltrato Seguramente hayas leído y tengas referencias sobre cómo es la conducta de una persona que maltrata. Sobre esta temática hay artículos y artículos.

Sin embargo, quiero hablar del maltrato encubierto. Es un tipo de patrón conductual que es difícil de identificar ya que socialmente está reforzada incluso premiado.

Las personas que se mueven y que funcionan a través de este mecanismo son personas con un alto grado de dependencia emocional asociado a un gran miedo a la soledad. Existen muchas carencias afectivas y el no haber madurado y aprendido a reforzarse y amarse a sí mismos o mismas hace que busquen eso en lo demás.

Por este motivo son seres extremadamente atentos y detallistas. La forma de relacionarse con los demás es correcta, es más, se suele pensar sobre este tipo de perfil que son muy amables y que tienen un gran corazón. Y no es algo que no esté en ellos o ellas, solo que lo que inspira sus acciones es un profundo miedo y terror por no ser amados y esto se pone de manifiesto a largo plazo en una serie de comportamientos que después comentaremos.

Este patrón de comportamiento suele manifestarse en sus relaciones sociales, pero más aún en las relaciones íntimas. En estas personas hay una profunda necesidad de tener y compartir su vida con alguien.

No conciben la vida en soledad.

Por esta razón cuando empiezan una relación íntima, son extremadamente cordiales, amables, atentos, serviciales, protectores y “nunca” fallan.

Se convierten en el centro de atención de la persona y son grandes genios para adaptarse y encajar perfectamente en el ambiente social de ésta. Como tienen una gran necesidad de estar y aferrarse a la persona, poco a poco van consiguiendo aislarla hasta que finalmente la vida de la pareja queda reducida a ambos.

El estar y compartir con otras personas no es relevante, porque lo único que les interesa es pasar todo el tiempo que puedan con la pareja. Este comportamiento se ve claramente en las primeras fases de la relación de pareja. Al momento que se conoce como “enamoramiento”. Existe una necesidad constante de saber de la otra persona a cada momento, una gran necesidad de control que es camuflada bajo verbalizaciones como “quiero saber de ti porque te quiero”.

Aparentemente esto puede parecer algo fantástico y maravilloso, sin embargo, a medida que pasa el tiempo, si la pareja no responde con la misma intensidad aparece el conflicto. Como su necesidad es la de estar con la pareja en todo momento, si ésta decide tomar sus propias decisiones o hacer planes sin tener en cuenta a su pareja, aparecen los reproches, los celos, las inseguridades y los miedos.

Su carácter sutil, hace que verbalicen que no les importa ni molesta el que no cuentes con él o ella, sin embargo, ponen de manifiesto que no es así con conductas o gestos, haciendo sentir a la otra persona responsable de su decisión con manipulaciones y chantajes emocionales.

Tienden a ser dramáticos, victimistas y controladores. Se da tanto en hombres como en mujeres.

Existe un deseo alto de controlar todo lo que hacen en el día a día, porque tal y como lo entienden, el amor es así. Una muestra constante de afecto y dedicación. Y si la pareja no lo hace, es porque no le amas. Confunden el amor con el control.

Lo que al principio era un comportamiento que aparentemente nacía del amor; detalles, cuidado, protección, cariño… ahora es un comportamiento que nace el egoísmo. Y es que lo único que mueve a estas personas a hacer entrega de tanto, no es más que su deseo de sentirse querido o queridas, atendidas y amadas. Dan lo que necesitan recibir. Todo lo que entregan lo entregan esperando una devolución y si esta no llega con la misma intensidad o frecuencia se sienten dolidos/as.

Este comportamiento que tan arraigado está a la sociedad no es más que un tipo de maltrato emocional. No es amor, porque el amor no exige, da sin esperar recibir porque dando el amor ya siente amor en sí mismo. El amor se retroalimenta de sí mismo, no necesita nada más. Aunque sí valora y aprecia las muestras del mismo.

"El auténtico amor nace cuando uno siente la capacidad de amar dentro de sí, y la entrega es sólo una expresión y manifestación".

NO un reclamo.

Es cierto que en las relaciones tiene que haber un equilibrio, ya que cada uno elige a un compañero o compañera para compartir, apoyarse y crecer. Pero si en la relación no sientes que eso se esté dando, hay que tomar una decisión madura de dejar la relación y no intentar cambiar o modificar a la persona.El hecho de hacerlo en sí mismo es un acto egoísta ya que no estás amando a la persona, sino que estás intentando que ésta encaje en tu expectativa, y si no es así la haces sentir mal. Haces sentir que él o ella no saben amar….

Las relaciones de dependencia asfixian, te absorben el oxígeno que te hace falta para vivir y terminan anulándote si no pones límites al control y manipulación.

Este es el maltrato encubierto y está encubierto porque no hay golpes, no ha agresión física, pero sí hay una pérdida de libertad y de expresión. Y cuando esto pasa es porque uno mismo no se está respetando.

Una de las bases que establece un amor sano es el RESPETO. Si este se viola, ya sea a través de una conducta, verbalización u otra forma habría que indagar y ver qué carencias se están poniendo de manifiesto. Atenderlas, para así cultivarlas y no romper los límites.

Una forma de identificarlo es prestar atención a cómo te sientes, si en ti existe tristeza, apatía, desánimo, falta de energía e incluso dolor físico porque se ha somatizado el malestar, no te le des más vueltas y toma una decisión.

Cuando elijas a una pareja, hazlo porque quieras, no porque lo necesites.

Sé feliz primero antes de intentar hacer feliz a otra persona, porque cuando eliges a una persona que ya es feliz, ésta no necesita que la hagas más feliz, sólo quiere y desea compartir su felicidad.

Este es el verdadero crecimiento y desarrollo en el amor. Ama sin expectativas, ama sin imposición, ama desde tu propio amor.

Si te ves en alguno de estos comportamientos, ya es un gran paso. Para poder crecer y evolucionar el primer paso es identificar y reconocer. Y a partir de ahí solo queda soltar.....